Este libro le ha cambiado la vida a millones de seres humanos.
Fue traducido a 25 idiomas y se ha convertido en el soporte de muchos que,
de forma individual o reunidos en grupo, tienen la necesidad de ir en busca de una vida con propósito, accediendo y practicando un conocimiento superior.
No pretende ser un dogma ni una religión pero está íntimamente ligado con lo más profundo de la espiritualidad trascendente. El libro, de forma explícita, aclara que su objetivo no es sentar las bases para iniciar un culto más.
Un Curso de Milagros es un camino espiritual. A través de sus 1400 páginas, se despliegan frases y ejercicios a los que puede acceder quien quiera aprender, practicar y aplicar en su vida diaria cada una de sus 365 “lecciones”.
Es una guía para reconectar con otras dimensiones de nosotros mismos, para recordar de dónde y a qué venimos y, principalmente, que somos creadores de nuestra realidad.
“Todos aquí andamos buscando.
Estar en la tierra implica buscar.
Pero dónde buscamos -dice el libro- depende de nosotros.
El Curso de MIlagros es, en sí, un mapa a Dios.
¿Es el único mapa?
¡De ninguna manera!”, María Rosa Wynn, traductora del elibro al español.
Los ejercicios ayudan a la toma de conciencia de que todo lo que pasa en el afuera está íntimamente relacionado con nosotros, que somos responsables de ello y que lo externo es solo ilusión.
La comprensión y la práctica ayudan a despejar los obstáculos que crea la mente, los aprendizajes erróneos y los condicionamientos que impiden que podamos ser felices en el aquí y en el ahora. Y así se producen los milagros.
EL MILAGRO ES UNA CORRECCÍON
Los milagros a los que se refiere el libro son un cambio en la manera de percibir lo que acontece y, de esta manera, es cómo el afuera se transforma. El mismo curso lo explica: “el milagro corrige este terrible error con respecto a ti mismo con la misma dulzura con la que una madre amorosa adormece con su canto a su criatura” (CT. 2.8.2) El milagro elimina la necesidad de tener preocupaciones de rango inferior. (T.2.A.11.(1)1).
El poder del milagro para ajustar niveles genera la percepción correcta que da lugar a la curación. (T.2.A.15.(5)1)
“Lo que cambia es, principalmente, la manera. Cambia cómo se nos aparece una experiencia en nuestra mente y la vivencia que tenemos de ella. Nuestra felicidad tiene que ser constante. Si esto no sucede, es que no lo hemos pedido”.
Así explica el impacto de UCDM Lisbeth Adrianza. Ella es una gran maestra. Coordina cursos y da charlas en diversos países desde hace décadas. Fue aprendiz y es hermana de María Rosa Wynn, la mujer que tradujo el libro al español.
“La continua popularidad del libro se debe a que produce resultados tangibles en las vidas de las personas que lo estudian y aplican sus principios. Es una invitación a una manera de vivir aquí que nos saca de la amargura del rencor y de la culpa” agrega.
Otro de los temas fundamentales del UCDM es el perdón. Lisbeth dice: “el problema con el perdón es soltar los propios argumentos. Y los argumentos los da el Ego. La paz tiene que estar por encima de tus argumentos, de tu orgullo. El espíritu te dice “¿De qué te estas defendiendo si no es verdad? ¿Dónde está tu atención? Restale poder. No busques afuera el amor que tú no te das si lo de afuera es un reflejo tuyo. Si no te das amor, es difícil que recibas”
EL LIBRO Y LA VOZ
El Curso se compone de tres libros: El Texto, que funciona como base teórica, el Libro de Ejercicios y el Manual para el Maestro. Fue publicado por primera vez por la Fundación para la Paz Interior, en junio de 1976. Las personas que lo han escrito no se reconocieron como autores. Ellos dicen que sólo trascribieron aquello que les fue dictado. Su certeza sobre esto radicó en que el contenido recibido fue tan profundo y revelador que ninguna mente humana hubiese sido capaz de poder crearlo.
Helen Schucman y William Thetford eran profesores de Psicología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Columbia. William trabajaba junto a Helen y, cansado de las discusiones que tenía, le dijo: “tiene que haber otro camino”.
Le sugirió entonces a su colega que anotara los sueños de alto nivel simbólico que ella estaba teniendo.
La psicóloga empezó a anotar sus visiones en un cuaderno de taquigrafía.
“Este es un curso de milagros’. Ese fue mi primer contacto con La Voz”. Así lo escribió Hellen en el prefacio del libro. “Yo anotaba lo que La Voz ‘decía’ y al día siguiente se lo leía a Bill y él lo pasaba a máquina”.
Para ellos, reconocidos académicos, haber podido sostener el proceso de escritura (o canalización) durante los 7 años que duró fue algo desafiante.
No dudar de su salud mental era todo un milagro.
Schucman y Thetford se definieron a sí mismos como colaboradores del libro. Cedieron sus derechos a la Fundación por la Paz Interior, una organización sin fines de lucro que se dedica a publicarlo y a difundirlo.
En Argentina y en el mundo, hay cientos de grupos de estudio, páginas de Facebook y links de descarga gratuita, como por ejemplo: http://un-curso-de-milagros.org/ o también https://lecciones.acim.org/es/.
Además, el libro se puede conseguir en librerías especializadas. La información está disponible. Lo que transforma nuestra vida es lo que cada uno haga con ella. Cómo dice Lisbeth:
“Se trata de despejar los obstáculos que nos impiden llegar a la verdad de lo que somos.
A esos obstáculos los ponemos nosotros. O somos responsables de este mundo y de todo lo que sucede o somos una víctima. Cuando nos convencemos de que somos víctimas, creemos que la situación depende del afuera. Ahí es dónde se gestan las complicaciones”.
Natalia Carcavallo
http://wetoker.com