fbpx

Todos somos esenciales

Cuando miramos un horizonte sin certezas, quedamos descolocados. Sin embargo, en la solidaridad y el compromiso con el otro, podemos encontrar una fuerza nueva.

Aprender a parar: ¿Cuándo es suficiente?

No podemos detenernos. Siempre hay algo más para hacer: un problema que atender, un chat que reclama, un corazón para poner en Instagram y un audio de más de dos minutos al que nos resistimos a darle play. Por qué somos esclavos de nosotros mismos. Por Natalia Carcavallo

×